A principios de año, me llamó Antonio Marchesi en nombre de la mesa de ultraligeros de la RFAE y me comenta que, a petición de la Federación Española, la Federación Aérea Internacional (FAI) quiere hacer una prueba de competición internacional, federada pero fuera de competición, para decidir si se incluía dentro de los campeonatos internacionales, la categoría de autogiros.
Eran épocas de bonanza, así que me convenció con el argumento de que esa prueba se iba a hacer en Israel, en el desierto y con todos los gastos pagados. Yo que soy un enamorado del desierto y de volar, accedí antes de que terminara la frase. Así que busqué un copiloto para hacer primero el campeonato de España, obligatorio ganarlo para ir a Israel y que nos serviría un poco de entrenamiento, y después el campeonato del mundo.
Había que formar categoría, siendo necesario 4 aeronaves. El campeonato se iba a celebrar en dos etapas. La primera en San Torcuato (Rioja) y la segunda en Camarenilla (Toledo). Para la primera busqué tres tripulaciones más y con copilota que pesa menos, nos fuimos el 22 de mayo de 2011 para San Torcuato.
Recuerdo la cara de bobo que tenía tratando de aprender todo. Desde esa primera vez, me tomé la competición como una cosa seria, no como ir a dar una vuelta con los amigos. Eso ya lo hacía. No era el caso de muchos de los demás. Recuerdo incluso que mi por aquel entonces socio, me dijo -«No te lies, que es solo para ayudarles, que te lías, te lías …».
Las pruebas me parecieron hasta peligrosas. Ir con poca gasolina, volar recto sin poder desviarte … Lo que es la inexperiencia. Yo creo que la gente no compite, bien porque no les gusta quedar mal, bien porque no tienen suficiente confianza en sus habilidades. Pero hasta que no lo intentas, nunca lo sabrás.
Así que allí estabamos todos, en San Torcuato. Pero ahora no eramos amigos, ahora eran … ¡el enemigo!

Y allí empecé a conocer a los que serían mis nuevos amigos durante 5 años y perfectos desconocidos posteriormente. No quiero decir enemigos, salvo una honrosa excepción, que mi concepto sobre esa persona de la que usted me habla va a ser siempre, con perdón, pero es que así se define con sus acciones, de perfecta hija de puta; pero me decepcionaron tanto siguiendo sus propios intereses que no quiero mantener trato con ellos.
A lo que voy, que ahí empezó todo.
Os voy a poner una foto a ver si conceis a esta chica. Famosa meteoróloga ¡que sale por la tele!. Un encanto de mujer, doy fe.

Con esta primera etapa sentamos los conocimientos básicos para competir. Había mucho que aprender.
La segunda parte se celebró en Camarenilla. Nos volvimos a juntar los mismos. Ahí ya quedó claro quién se lo tomaba en serio y quién no. Incorporo el relato de una revista, mejor que yo mismo lo escriba:
Ahora ya para Israel.
Yo pongo un circo y me crecen los enanos. Habíoa dinero para ir a Israel. Ya estabamos a punto de meter el autogiro en un contenedor rumbo a Israel, y entonces unos palestinos no tienen mejor ocurrencia que meter unos pepinazos a un autobus de turistas. Se anula el campeonato por la seguridad y a tomar viento Israel, volar en el desierto y el campeonato.
Como decía Humphrey Bogart, siempre nos quedará Cadiz, así que en diciembre, nos vamos como campeones de España a Cadiz, a Villamarco, el amigo Fernando y nosotros. Pero eso, eso ya es otra historia.